Llegado será el día en que el cuerpo se rebele Feliz ante el alma.

martes, 24 de enero de 2012

Fuera de foco.

imagina la vida como una superficie
sobre la que deslizamos nuestras
manos y en ella se empiezan a
sentir las texturas, los bordes,
los contornos de aquello que
elegimos darle volumen,
en contraste con
lo que optamos por dejar
perdido en una suavidad
olvidada, 
como sombra.
fuera de foco.

jueves, 19 de enero de 2012

Escribir como vos.

palabras nulas de expresividad. 

No quiero escribir como vos. Algo así como, ta ta ta bla bla bla, punto y coma, fuck you, etc.
Tu prosa me lastima, y no puedo leerte sin hacer un esfuerzo por terminar. No puedo escribir como vos, con esa escritura existencialista sartreana de decir lo que se me venga a la mente, como si entraras a un sótano a oscuras a buscar lo que sea, una media sucia, una herramienta oxidada, un libro amarillo y viejo, cosas que no sirven de nada, palabras nulas de expresividad.
Sentimientos desordenados: te amo, te odio, ahora no sé, lloro en silencio, se me humedecen los ojos, mojo el teclado y escucho el chasquido de la lágrima cuando aprieto en la tecla C.
Y no me lo decís, no me lo pedís, pero siento tu presencia paseándose alrededor de mí, luego de que abandonás el escritorio, y el insistente clic clic  cesó su concierto monocorde y de disparos y ahora sólo se sienten tus pasos rondando, como las gotas que caen lentas del techo luego de una lluvia sin tregua, así.
Tengo que ir a leerte al monitor, cuando ya lo he hecho hace años en tus ojos, en tus manos, en otras palabras diferentes a estas disecadas, de esas que, dicen, se las lleva el viento.
Y bla bla bla, escupís acá, vomitas allá: probaste alguna vez la terapia ? Te pregunto.
Probaste alguna vez suicidarte? Contestás.  Sos un neurótico depresivo, agregás para dejar bien claro tu método en contraste con el mío.
“Pero me gustó” te miento sin entusiasmo porque me cansé de leerte ya en la segunda línea que era larga, con una coma de más, y un error ortográfico.
A algunos quizás les gustás, y yo te pregunto si no probaste con terapia. Qué estúpidamente cruel abre parecido! No me salen las palabras cordiales que esta sociedad (nosotros dos digo, no “La sociedad”) a veces requiere para poder tener la cena en paz.
Intentaré algún día ponerme en tu lugar, desde donde disparás tus palabras bilingües, que dicen desconocerme, que me acusan, que se posan en el medio de mi frente.
Esperás de mí que tome la iniciativa en algo, no sé en qué…el despertar en la mañana. Eso está bien y es algo.      
Ahora intento escribir como vos, así, una tras otras las palabras inmediatas que surgen de las tripas, y mirá, línea tras línea, honestidad brutal, una coma de, más y un error hortográfico.
Y si te preguntás si estoy hablando de vos, no lo dudes: estoy hablando de vos. 

julio vgs